La acumulación de aire en una caldera puede afectar su rendimiento y eficiencia, haciendo que no caliente correctamente e incluso generando ruidos molestos. Purgar, o desairear, la caldera es el proceso de eliminar este aire acumulado. A continuación, te presentamos una guía paso a paso para purgar adecuadamente una caldera de agua caliente.

1. Preparativos

Seguridad Primero: Antes de comenzar cualquier procedimiento con la caldera, la seguridad debe ser tu principal prioridad.

Apagar la caldera: Es esencial asegurarse de que la caldera esté completamente apagada antes de intentar purgarla. Esto evitará posibles quemaduras y otros riesgos.

Espera a que se enfríe: Tras apagar la caldera, espera al menos una hora para que el agua en su interior se enfríe. Tocar o trabajar con una caldera caliente puede resultar peligroso.

Prepara tus herramientas: Asegúrate de tener a mano todo lo que necesitarás. Esto puede incluir llaves, cubos o recipientes, trapos y guantes de trabajo.

Ambiente adecuado: Trabaja en una zona bien iluminada y, si es posible, libre de distracciones. Es esencial ver bien lo que estás haciendo y estar concentrado en la tarea.

2. Reúne los Materiales

Necesitarás un recipiente para recoger el agua y posiblemente unas pinzas o una llave especial para abrir el purgador, dependiendo del modelo de tu caldera.

3. Ubica los Purgadores

Los purgadores se encuentran en los radiadores y en la caldera. Generalmente, son pequeños tapones o válvulas situados en la parte superior de los radiadores y en la parte inferior de la caldera.

4. Purga los Radiadores

1. Inicio: Comienza con el radiador más cercano a la caldera y continúa en orden hacia el más lejano.
2. Apertura: Coloca el recipiente debajo del purgador y, con mucho cuidado, abre lentamente el purgador con las pinzas o llave.
3. Eliminación del Aire: Primero saldrá aire (lo notarás por el sonido sibilante). Cuando empiece a salir agua sin burbujas, cierra el purgador.
4. Repetición: Repite este proceso en cada radiador.

5. Purga la Caldera

Al igual que con los radiadores, coloca un recipiente debajo del purgador de la caldera, ábrelo lentamente y espera hasta que salga agua sin burbujas antes de cerrarlo.

6. Enciende la Caldera

Una vez purgados todos los radiadores y la caldera, enciende la caldera y deja que funcione durante unos minutos. Verifica que todos los radiadores calienten uniformemente y que no se produzcan ruidos inusuales.

7. Verifica la Presión

Después de purgar, es probable que la presión del sistema haya disminuido. Consulta el manual de tu caldera para conocer la presión recomendada y ajústala si es necesario.

8. Consideraciones Finales

Si después de purgar la caldera continúas teniendo problemas, como ruidos, falta de calor o problemas de presión, es recomendable consultar a un profesional.

Conclusión

Purgar una caldera es un procedimiento sencillo, pero esencial para el correcto funcionamiento y la eficiencia del sistema de calefacción. Con estos pasos, podrás asegurarte de que tu caldera funcione correctamente y de manera eficiente durante el invierno.