¿Por qué mi termo eléctrico no calienta aunque el piloto esté encendido?
Si tu termo eléctrico no está calentando el agua a pesar de que el piloto indicador esté encendido, es probable que te estés preguntando qué está sucediendo.
Esta situación puede ser frustrante, pero afortunadamente, en la mayoría de los casos, tiene una solución.
Mi termo eléctrico no calienta… ¿Pero el piloto está encendido?
¿Qué significa que el piloto esté encendido? El piloto de un termo eléctrico indica que el dispositivo está recibiendo energía eléctrica.
Sin embargo, esto no garantiza que el agua se esté calentando. Hay otros componentes internos que deben funcionar correctamente para que el proceso de calentamiento se lleve a cabo.
Causas comunes por las que un termo eléctrico no calienta con el piloto encendido
Por lo general, hay cinco causas comunes por las que un termo eléctrico no caliente agua, a pesar de tener el piloto encendido.
Termostato defectuoso: El termostato es el encargado de regular la temperatura del agua. Si está dañado, puede que no esté enviando la señal necesaria para activar la resistencia.
Resistencia dañada: La resistencia es el elemento que convierte la energía eléctrica en calor para calentar el agua.
Termostato de seguridad activado: Este termostato protege al termo de sobrecalentamientos. Si se activa, corta el suministro eléctrico a la resistencia.
Problemas en la conexión eléctrica: Una mala conexión eléctrica puede impedir que la corriente llegue a la resistencia.
Anodo de magnesio agotado: El ánodo de magnesio protege al termo de la corrosión. Si está agotado, puede provocar un cortocircuito en la resistencia.
¿Cómo solucionar el problema?
Si tu termo eléctrico no calienta agua, y aun así tiene la luz encendida, hay cinco soluciones que puedes aplicar:
Verifica el termostato: Asegúrate de que esté configurado a la temperatura deseada y que funcione correctamente.
Revisa la resistencia: Si tienes los conocimientos necesarios, puedes utilizar un multímetro para comprobar si la resistencia está en buen estado.
Busca el termostato de seguridad: Localiza el botón de reset y restáuralo.
Comprueba las conexiones eléctricas: Asegúrate de que todos los cables estén bien conectados y no estén dañados.
Considera la edad del termo: Si el termo tiene muchos años, es posible que haya llegado al final de su vida útil.